Un buen jefe dedicado a “jefar” de verdad es la opción mas eficaz, rentable y operativa. Y cuidado con la tentadora tendencia a gestionar equipos on-line, así el jefecillo está más lejos y tiene servido eludir su papel. Los valores, la cultura empresarial, la sensación de pertenencia en un equipo, el liderazgo, la sincronización o el calor humano NO PASAN POR LA RED. Solo funcionan cara a cara, codo con codo. si de delega todo al contacto electrónico pronto dejará de haber verdadero equipo, cuanto más solo una “red más”.

Del libro: el jefe que no contaba chistes y el empleado que nunca se reía.

Nuevo: Asiste online a los seminarios Vivir sin jefe y Vivir con ...