Cuando bajábamos, don Víctor se fue a mi lado y me dijo: “ Juan Manuel, me has caído bien y te voy a dar el secreto para hacerte rico“. En un instante por mi mente pasan yates, viajes y, de pronto, creo que soy el hombre con más suerte del planeta, pues en unos momentos uno de los empresarios más destacados de la región me va a dar el “un, dos, tres” de cómo hacer dinero. No dejaba de ver hacia el horizonte como diciéndome, ¡allí están mis clientes!, y mientras sus ojos estaban clavados en la tarde, con una voz muy clara y contundente me explicó: “tienes que pensar en u producto que lo puedas hacer muy bien hecho, que te salga muy barato, que lo puedas vender muy caro y que lo puedas vender muchas veces… es fácil, si lo encuentras, ¡te harás muy rico!”